Darles Tiempo
Hay muchas cosas que me conmueven en mi trabajo. Una de ellas es escuchar a los niños y adolescentes hablar de su dolor o de los vacíos que perciben en la relación con sus padres. Hace unos días un chico de 14 años me dijo: «mi papá dice que no me hace falta nada, que me ha dado todo, que qué más puedo pedir… Y yo pensé: ojalá me hubiera preguntado alguna vez qué es lo que necesito, porque todo lo que me ha dado son cosas, pero su tiempo no, porque siempre está ocupado, trabajando».
Darles tiempo a nuestros hijos es darle valor a su existencia y a su presencia en nuestras vidas.
Darles tiempo y prestar atención a sus relatos, inquietudes e intereses es una forma de decirles: te amo, te respeto, eres importante para mí.
Darles tiempo a nuestros hijos es también darnos la oportunidad de hacer bien la tarea y establecer con ellos un pacto de amor y confianza.
Darles tiempo, estableciendo prioridades, dejando el trabajo en el trabajo e incorporándonos a las actividades familiares con atención plena es una forma de honrar ese pacto.
Que siempre tengamos la lucidez necesaria para ver con los ojos del corazón lo que es más importante.
Un abrazo a todos y todas,